No ha habido otra categoría de productos dentro de la industria de la seguridad que haya evolucionado tan rápido como la videovigilancia. Desde la introducción de la primera cámara de red, hace casi 30 años,, muchas cosas han cambiado. En los últimos años, el análisis de grabaciones de video a través de inteligencia artificial y aprendizaje profundo han despegado, mejorando aún más los niveles de seguridad, protección y eficiencia. Durante mucho tiempo, esta tecnología solo estaba disponible para empresas con grandes presupuestos, pero ahora es accesible para todos los usuarios finales.
La introducción de las de cámaras de red en la década de 1990 fue el primer paso hacia el "Internet de las cosas". Al conectar las cámaras a Internet, a una intranet o entre sí, se hizo posible intercambiar datos. Sin este desarrollo, soluciones como el análisis de video mediante inteligencia artificial no habrían sido posibles.